lunes, 5 de noviembre de 2007

La Rochelle, villa misteriosa.

Si alguien te pregunta una ciudad de Francia, seguramente contestaras, París, Lyon, Marseille o alguna otra gran ciudad. Si te nombro “La Rochelle” seguramente no sabrás de que ciudad hablo. La Rochelle, es una pequeña ciudad atlántica, no mas grande que Castellón o Cartagena donde lo mas conocido de ella es su museo acuático que es estupendo y que en honor a la verdad compite con el de Valencia en belleza pero no en espacio. Ha conseguido que esta ciudad destaque y le llegue cierto turismo.

Me lamento ahora que un edificio moderno, de menos de 50 años, dedicado a la biología marina eclipse otros focos de posible interés como la “puerta del puerto”, la casa de Henri II, la bolsa, la catedral y el puerto viejo.

Y aquí me detengo, en el puerto viejo. Un puerto de pescadores que en la edad media fue fortificado por la Orden del Temple en primera instancia aunque después fue fortificado mas intensamente en el siglo XV y XVI.

Escudo de La Rochelle,
recordando la Flota templaria

Y esto es lo que vengo a contar. ¿Que interés tuvo la Orden del Temple en disponer de un puerto protegido en la costa atlántica?, si nos ponemos en situación, en la época templaria el atlántico era el puñetero fin del mundo, mas allá de Finisterrae no había nada, ¿De que servia un puerto en el atlántico cuando el mundo conocido estaba circunscrito al mediterráneo?. El Temple tenia puertos en Colliure, Mallorca, Malta, Provenza, Sicilia, Palestina etc, interconectados entre si, era natural ¿Pero para que puñetas en el atlántico?, ademas, ¿Por que estaba allí el grueso de su flota?

Se dice que cuando las tropas del Papa arrasaron el país cátaro, después del desastres de Besiers y la Batalla de Murat, los cátaros comandaron a dos monjes la huida con un tesoro y se fueron a La Rochelle.

Se dice que cuando Felipe IV y el Papa Clemente V decidieron masacrar a los templarios, estos fueron detenidos sin demasiada resistencia, excepto la flota templaria, anclada en La Rochelle, que se desvaneció como si nunca hubiera existido El destino de la flota es un misterio. La teoría más factible asegura que la flota se dirigió hacia Escocia donde a la sazón reinaba Robert Bruce que estaba excomulgado por el Papa Clemente y cuyos territorios estaban colocados en interdicto. Reino en el que, evidentemente, el rey no tendría muchos reparos en pasar de las ordenes del Papa... y que se hallaba inmerso en una lucha a vida o muerte con Inglaterra, razón por la cual Robert Bruce debería haber acogido con los brazos abiertos a los caballeros templarios, expertos guerreros. Se llega a decir que la victoria decisiva de Escocia sobre Inglaterra en la batalla de Bannockburn fue una carga de caballeros templarios. (Lo siento Mel Gibson, no fue tu personaje William Walace)

Se dice, se habla, se comenta, pero nadie lo sabe. ¿Por que se dice esto?, por que en Escocia esta la capilla Rosslyn atribuida a los templarios, dando inicio a leyendas en las que se dice que escondieron en su ornamentación las claves de su supuesto saber hermético y del lugar de su tesoro.

Para acabar los misterios de La Rochelle, esta ciudad, también es cabeza y origen de una de las rutas del camino de Santiago, con todas las suposiciones iniciáticas y esotéricas y por ende, misteriosas que se le atribuyen (el que aun crea que el camino de Santiago es algo religioso que se lo haga mirar)

1 comentario:

Jo mateixa dijo...

Podrías añadir una entrada con fotos de la ciudad. Así veríamos que además de misteriosa es hermosa.
Irá a la lista de pendientes.