sábado, 15 de diciembre de 2007

Feliz ¿lo qué?

No hay nada mas complicado para los que no creemos en el nacimiento del niño-Dios después de un embarazo mágico de 16 días, por la acción de un palomo, que felicitar la navidad. Pero, lo que esta claro es que no quiero entrar en el terreno de los descorteses o de los rompedores del “statu quo” social ni en el ostracismo de los insensibles.

Mas complicado es tener sobrinos a los que regalar en base a un anuncio de cocacola vestido de rojo copiado de “hombre de hielo ruso” salpimentado por la mitología de Cronos y Odin. O casi peor aun basándonos en unos personajes de ficción “magos” con tintes de astrónomos de Oriente sin avergonzarse de engañar a un niño.


Pero si cabe, es mas difícil explicar por que os voy a felicitar.


El sol llegara pronto a su cenit en el trópico de capricornio al medio día del solsticio de invierno, el sol a partir de ese momento, aumentara el tiempo que irradia la tierra con sus rayos, es la fiesta tanto romana como celta del “sol invicto”, la Saturnalia.



L'hiver ou les Saturnales de Antoine-François Callet
Museo del Louvre, Paris, Francia


Os voy a felicitar pues, la pagana fiesta de nuestra mas antigua Europa con la letanía Romana:

"Esta es la noche del solsticio, la noche más larga del año. Ahora las tinieblas triunfan y aún así todavía queda un poco de luz. La respiración de la naturaleza está suspendida, todo espera, todo duerme. El Rey Oscuro vive en cada pequeña luz. Nosotros esperamos al alba cuando la Gran Madre dará nuevamente a luz al sol, con la promesa de una nueva primavera. Así es el movimiento eterno, donde el tiempo nunca se detiene, en un círculo que lo envuelve todo. Giramos la rueda para sujetar la luz. Llamamos al sol del vientre de la noche. Así sea."

Séa pues... ¡¡¡Laica Navidad!!!, ¡¡¡Felices Saturnales!!!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Estimado Amigo

Siempre dando muestras de erudición, genio y figura.

Si no fueras tan bruto...

Jordi.