Anoche me hice una tortilla de alcachofas. Esta buenisima. Me ha dado por pensar en nuestra capacidad acomodaticia ante lo que conocemos.
Todos hemos comido tortillas, de cebolla, patata, jamón, queso, atún, patata, ajos tiernos, espárragos y diría que ya hemos recorrido todas las “clásicas”. Pero se pueden hacer tortillas de puerros, calabacin, alcachofas, hinojo, acelgas, coliflor, brocoli, zanahoria, tomate, berenjena, guisantes, habas, apio, yuca, achicoria, berza, borraja, 1000 tipos de setas, cardo, rábano, calabaza, pepino, escarola, judías verdes, tabella y hasta endivias.
Sin embargo, nos hemos acomodado en una serie de productos como si probar cosas nuevas fuera pecado.
Quizás es que el ser humano somos así, nos da miedo lo desconocido, nos da miedo cambiar, somos conservadores por naturaleza.
Personalmente voy a dejar de ser conservador culinariamente y prometo probar al menos 5 tortillas “raras” y como garantía de esta promesa hasta que no lo haga, no me meteré con los curas.
3 comentarios:
La de cardos está buena. Y seguro que la mayoría de las otras también.
Te lo dice una que de pequeña quiso "innovar" y se le ocurrió probar un bocadillo de polvoron.
Creo que aún lo estoy digiriendo. Pero lo probé.
L.
Lo del bocadillo de polvorón ya ha recorrido medio mundo (ja, ja).
A mi me gusta hacerme tortillas con las sobras del día anterior (ensaladilla rusa (sin mahonesa), judías blancas...).
Aceitunas negras y nueces.
No está mal. Pero es mejorable.
L.
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